Batacazo de Marruecos: venció a Bélgica 

 

Marruecos sorprendió a Bélgica en el estadio “Al Thumama” y lo derrotó por 2-0, en el marco de la segunda fecha del Grupo F del Mundial de Qatar. Este resultado deja al rojo vivo la zona en la que los europeos si ganaban ya se aseguraban su pase a octavos de final. Ahora, se jugarán el pasaje a la próxima ronda en la última jornada frente a Croacia, que aplastó 4-1 a Canadá y la eliminó de la Copa del

 

Empezó raro el partido. Bono, arquero del Sevilla, formó junto al resto de sus compañeros para escuchar el himno, pero en la foto de equipo segundos después no estaba. Jugó como titular Munir, que no tardó en tener que intervenir. Se impuso en un mano a mano a Batshuayi.

Bélgica dominó el esférico, pero le costó generar en estático y también de pelota parado. Pasaban los minutos y la ansiedad se apoderó de los futbolistas belgas, que este domingo tampoco pudieron encontrar liberado a Kevin De Bruyne. Ya dijo que no puede jugar como lo hace en el Manchester City.

A pesar de los intentos de Bélgica, fue Marruecos la que más se acercó al gol. Es más, hasta inauguró el marcador. Pero el colegiado mexicano César Arturo Ramos anuló el tanto de falta directa de Hakim Ziyech porque Romain Saiss, quien intervino en la jugada al hacer ademán de ir por el balón colocándose en el campo de visión de Courtois, estaba en fuera de juego. La acción que dejó a Marruecos caliente camino a vestuarios.

 

Fue a los 27 del complemento y otra vez de tiro libre cuando Abdelhamid Sabiri buscó el primer palo del Courtois, quien dio un paso adelante esperando el centro y eso lo condenó. Además, Saiss volvió a aparecer para incomodar, partiendo de posición legal, y el 0-1 sí se mantuvo en el marcador.

Bélgica intentó conseguir un empate más a la fuerza que con ideas claras. Romelu Lukaku debutó en el Mundial, con diez minutos para ver si cazaba alguna dentro del área, pero ni rozó una ocasión. Sí lo hizo Zakaria Aboukhlal, ya con Bélgica volcada, en el minuto 92. Pase atrás de Ziyech y el delantero del Toulouse superó a Courtois con una definición perfecta. Disparo alto pegado a un palo.

Sin dudas fue un golpazo inesperado para los belgas, que llevaban 13 partidos sin derrotas en fase de grupos de los mundiales y ocho victorias consecutivas. Su última caída había sido en 1994 por la mínima ante Arabia Saudita.