Con la intención de mejorar la performance de su Chevrolet, el volante balcarceño Santiago Mangoni realizó una jornada de pruebas en el autódromo “Roberto Mouras” de La Plata. En la ocasión fueron evaluadas distintas cuestiones que tiene que ver con la puesta a punto, bajo la atenta mirada del chasista Alejandro Morgera. Todo ello apuntando a lo que será la competencia del venidero fin de semana en el autódromo “El Villicum” de San Juan, por la octava fecha del calendario del Turismo Carretera, ocasión en la que se disputará el tradicional “Desafío de las Estrellas”.

Fue la primera prueba que pudo realizar el balcarceño en lo que va de la temporada. Después de haber vuelto a armar su propio equipo, ahora con base en Dolores, Mangoni concretó el ensayo que venía esperando buscando dar un salto de calidad en el auto después de haber estado lejos de la punta en varias fechas. "Probamos cosas de puesta a punto que eran necesarias, por suerte pudimos evolucionar y quedamos conformes. Espero que funcione mejor el Chevrolet en San Juan. Di alrededor de 12 vueltas sin un tiempo de referencia porque intentamos ver los cambios en la actitud del auto", expresó.

Mangoni ocupa actualmente el 27° puesto en el torneo, con 93,50 puntos y se enfoca en recuperar el protagonismo que le permita ingresar a los “tres de último minuto” para la definición del certamen de este año.  

“Era una prueba necesaria porque estábamos un poco perdidos con el auto y la puesta a punto. Siempre es bueno poder probar y sacarse algunas dudas respecto del chasis. Durante los fines de semana de carrera es difícil trabajar sobre estas cosas por el poco tiempo que hay en los ensayos”, explicó el local, que disputó las 6 primeras fechas con el Impiombato Motorsport,

El plan de trabajo en el “Mouras” no contempló mucho tiempo en la pista. “No queríamos dar muchas vueltas porque usamos un motor que nos prestaron Norberto Fontana y Juan Carlos Labarere. Les agradezco a ambos, porque sin su ayuda, no hubiera podido probar”, destacó.

Debido a que el ensayo se lleva a cabo con un impulsor prestado, Mangoni explicó que “tratamos de ser concisos en los cambios, y ver las reacciones del auto aprovechando que tenemos la pista para nosotros solos. Hacer algún cambio, mirar la cámara a bordo y analizarla y volver a salir”.

Los primeros giros en la pista de 4.265 metros, en una jornada ventosa, fría y con cielo despejado, fueron alentadores para Mangoni. “Arrancamos tal como terminamos en Concordia y fuimos haciendo algunos cambios que fueron para mejor”, indicó el balcarceño, que viene de clasificar 37º y llegar 20º en la competencia final de la última fecha en Concordia.