La ciudad está conmovida tras la trágica muerte de Iara Rastelli, una joven de 21 años que perdió la vida el día de su cumpleaños en un accidente automovilístico. La tragedia ocurrió en la noche del miércoles, cuando Iara y dos acompañantes viajaban en un Chevrolet Astra por la ruta 226. El vehículo se despistó a la altura del kilómetro 63, y a pesar de ser rescatada con vida, Iara falleció pocas horas después en el Hospital Municipal debido a la gravedad de las heridas sufridas.

El accidente ha reavivado un debate que ha persistido durante años sobre la seguridad de ese tramo de la autovía. Conductores y vecinos de ese sector han expresado su preocupación por la peligrosidad de la rotonda que sirve como retorno en dirección a Balcarce. Este trayecto, que desemboca en la rotonda, presenta un desafío para los automovilistas, quienes deben maniobrar a la izquierda, muchas veces a alta velocidad, para evitar el guardarraíl.

En este contexto, se ha realizado un llamado urgente a las autoridades de Vialidad Nacional para que evalúen la posibilidad de mejorar la seguridad en la ruta. 

Entre las propuestas se incluyen la mejora de la iluminación, la instalación de señalización más clara y la colocación de advertencias lumínicas para alertar a los conductores sobre el peligro inminente en esa área.

En resumen, la muerte de Iara no solo representa una pérdida irreparable para su familia y amigos, sino que también pone de manifiesto la necesidad de tomar medidas inmediatas para evitar que tragedias como esta se repitan en el futuro.