Mientras en el Museo del Automovilismo se presentaban los detalles de la histórica jornada que vivirá Balcarce en noviembre con el traslado de los restos del quíntuple campeón del mundo del cementerio municipal a un mausoleo que se construyó en el edificio de 18 y 17, Rubén Fangio, hijo de JMF, habló con Radio Líder acerca de las sensaciones en la previa de este evento que concitará el interés mundial. “En su momento con Cacho dimos el visto bueno porque creemos que es lo que debe ser. Los restos de mi padre corresponde que estén en el Museo. Será un momento seguramente muy emotivo para todos, y ante los ojos del mundo. Pero es el lugar donde tienen que estar”.

 

Por otra parte, señaló que “fueron muchas cosas las que viví desde el comienzo de esta historia, pero me sentí siempre muy acompañado por gente que se interesó y por parte de la prensa. A esta altura del partido uno cambia por más apellido que tenga, no digo que no nos impactó como familia, pero lo hemos sobrellevado entendiendo que es un derecho al que accedí. Sólo mi entorno familiar sabe de las angustias y los momentos que vivimos en estos diez años”, expresó.

 

En otro orden, y sobre el legado de su padre en el mundo entero, Rubén mencionó que “la gloria es del Chueco, no nuestra. Nosotros somos los hijos de Fangio, pero la gloria es toda de nuestro padre. Sí observamos cuando viajamos el cariño, el respeto y el reconocimiento que el mundo tiene para con Juan Manuel Fangio. Eso es muy emocionante”, concluyó.