Una investigación llevada a cabo por la subDDI Balcarce derivó en la realización de un allanamiento en la Unidad Penal N° 35 de la ciudad de Magdalena donde se secuestró el celular los chips y documentación de interés para la causa. La celda allanada corresponde a un detenido condenado previamente por un robo agravado. Desde la Unidad 35 del penal de Magdalena, un detenido usaba un celular para recaudar. El presidiario creó un perfil falso con fotos de una joven mujer y a través de éste comenzaba la primera etapa de captación, la que consiste en entablar contacto con las víctimas, generalmente hombres de edad media, con los que generan una relación virtual la cual van llevando hacia el contexto sexual rápidamente. Para esto, las supuestas mujeres envían fotografías y videos de desnudos, y logran que sus víctimas les envíen fotos íntimas a la cuenta, siempre por mensajería privada”, explicaron los investigadores. Después le pedía otras en retribución: pero del "sexting" pasaban a la extorsión.

La victima que se hizo presente en la sede de esta subDDI para hacer la correspondiente denuncia, indicaba que desde el número de teléfono con el que se hablaba con la supuesta mujer, se comunicó un hombre que decía ser funcionario policial  y que a cambio de no iniciar una causa penal por las imágenes enviadas, debía de pagarle la suma de 10 mil pesos.  Esta situación se da, debido a que los delincuentes han reunido las capturas de pantalla, y a raíz de las conversaciones mantenidas, con suficiente información personal y de contacto de la víctima como para llevar el delito a la siguiente etapa, la de la extorsión, previo a esto, y para sorpresa de los damnificados, son bloqueados de Facebook y la conversación con las mujeres es borrada, no teniendo más acceso a las mismas.

 

A partir de la tarea del Fiscal Rodolfo Moure y de la subDDI Balcarce, a cargo del comisario Maximiliano Blanco Río, se analizaron las comunicaciones recibidas, el análisis de las antenas y descubrieron que provenían de la Unidad 35 de Magdalena.

Con los elementos de prueba reunidos el Juez de Garantías, Juan Tapia ordenó el allanamiento y requisa de las celda 23 del Pabellón 24 en la que secuestraron el teléfono celular involucrado, y documentación donde tenían una especie de legajos de las víctimas y la inteligencia realizada sobre las mismas.

 

El detenido fue procesado por el delito de extorsión, permaneciendo detenido en la unidad carcelaria hasta la resolución de la justicia.