El cuerpo de socorristas está integrado por 14 personas que se distribuyen las tareas en dos turnos. El test del olfato sirve para identificar uno de los síntomas del Covid. Trabajan junto al personal de Tránsito en los controles ubicados en los retenes a los accesos a la ciudad.
Mientras se comienza a hablar tibiamente de la denominada pospandemia, con la vacuna ya en el horizonte del mundo de la ciencia, y con la ciudad de vuelta en la fase 5, la más avanzada del aislamiento social, hay una tarea que, paralelamente, no tiene pausa ni da respiro a quienes la llevan adelante. Es la de los socorristas voluntarios de Balcarce que despliegan todo su trabajo junto al personal de Tránsito de la Municipalidad en los principales accesos a la ciudad. El cuerpo de socorristas está integrado por 14 personas que se distribuyen las tareas en dos turnos de seis horas cada uno, y realizan –en promedio- 200 controles de olfato por día –anosmia- que comenzó en el mes de abril. Este trabajo contribuye en gran medida a construir esa primera barrera sanitaria para enfrentar la pandemia. El aislamiento social, preventivo y obligatorio hace que el contacto con el exterior, el transporte público y las cuestiones básicas de subsistencia deban realizarse con sumo cuidado, extremando las medidas preventivas y evitando riesgos innecesarios, sobre todo pensando en los denominado grupos de riesgo. En esta tarea, el aporte de los socorristas voluntarios de Balcarce es fundamental. Particularmente en los retenes de los accesos a la ciudad, los socorristas contaron que están abocados a la atención y prevención en la ciudad de Balcarce junto a subDDI Balcarce, la División Tránsito de la Municipalidad, y Policía Comunal. “En esta pandemia decidimos con nuestra institución montar guardias las 24 horas desde el día 0, además de colaborar con Desarrollo Social en la entrega de alimentos y demás necesidades. Trabajando afuera de los bancos ayudando a los más necesitados y prestamos atención de salud en cada sucursal. No podemos ayudar a todos, pero entre todos podemos ayudar. Somos los Socorristas Voluntarios de Balcarce y estamos para colaborar y ayudar en la contingencia”, destacan sus integrantes al explicar la diversa tarea que realizan en el Partido.
Los socorristas, además de su mencionado aporte durante la pandemia por el coronavirus, brindan capacitación en primeros auxilios; RCP, DEA, trauma, atención inicial del quemado, control de heridas y hemorragias, atención inicial en el parto, en intoxicaciones, en convulsiones, en alteración de la presión arterial, trauma, abordaje de las víctimas y múltiples víctimas, y traslado en tabla espinal. En lo que va de estos años, entre cursos y charlas han capacitado a más de 500 personas en nuestra ciudad, tránsito, policía comunal, subDDI y personal Lego (no profesional).
Pero la historia de los socorristas balcarceños, haciendo una reseña, comenzó en Buenos Aires en el año 2014 con la formación de grupos de socorristas entre fuerzas de seguridad, Gendarmería, policías y civiles, cascos blancos y grupo especiales de socorros. Entre ellos, se formaron dos personas de nuestra ciudad, Claudia Banega y Alberto A. Pereyra, que participaron como instructores de primeros auxilios en esas unidades y se capacitaron en búsqueda de personas con perros de rescate, con RH K9, bajo la dirección de Pedro Luis García conformado un enlace con Balcarce. “Actualmente somos 20 socorristas activos entre mujeres y hombres en la institución y cuatro no activos que, llegado al caso, serían convocados”, contaron a La Vanguardia Claudia Banega y Alberto Pereyra.
Un test clave
Durante la pandemia, los profesionales de la salud comenzamos a notar la importancia de poder detectar pacientes con anosmia (falta de olfato) como síntoma de presentación de la enfermedad por coronavirus (COVID-19), causada por el síndrome respiratorio agudo severo coronavirus 2 (SARS-CoV-2). El reconocimiento de la pérdida súbita del olfato -con alteraciones del gusto como ageusia (falta de gusto) o hipogeusia (disminución del gusto)- como síntoma de esta enfermedad obligó a modificar la definición de caso sospechoso. El virus presenta capacidad y afinidad por el tejido neural. El neuroepitelio olfatorio se encuentra ubicado en la nariz. Está presente en los cornetes superiores, las fosas nasales y el techo de la nariz. Ocupa una superficie de aproximadamente 5 cm2.
Células olfatorias
Se estima que el ser humano tiene entre 10 y 20 millones de neuronas o células olfatorias. Estas células proyectan una dendrita a la superficie del neuroepitelio, y cada una tiene entre 8 y 20 cilios que se sumergen en la capa de moco. La capa de moco protege al epitelio olfatorio de temperaturas extremas, de contaminantes y de partículas irritantes. Es, además, el primer sitio de contacto de las partículas odoríferas con las células olfatorias.
Más Noticias
- 03-07-2025 Campaña solidaria: Leones lanzó "Tu abrigo me abriga"
- 03-07-2025 CAPS de Laguna Brava: aclaran que el cierre es temporal
- 03-07-2025 Un juez decidió la liberación asistida para el femicida de Melina Briz
- 03-07-2025 Celebran su día los cadetes de Bomberos Voluntarios
- 03-07-2025 Joven talento: Ciro Mancino se probó en Rácing Club de Avellaneda
- 03-07-2025 Alumnos del Jardín de Infantes Nº 903 recorrieron el CIC
- 03-07-2025 Abordaje de la infancia: una mirada transdisciplinaria
- 03-07-2025 Alumnos del Colegio “Santa Rosa de Lima” visitaron la Casa del Bicentenario
- 03-07-2025 Apertura del período de inscripción a los talleres que ofrece el CIPS
- 03-07-2025 Fuerte choque en Favaloro y 26: también se vio afectado un auto estacionado