“Esta tarde los 37 diputados de UxP vamos a estar sentados en nuestras bancas para tratar los proyectos de presupuesto, fiscal impositiva y endeudamiento enviados por el Poder Ejecutivo. Durante este año recibimos 16 proyectos (incluyendo presupuesto y fiscal) iniciados desde el Ejecutivo provincial, de los cuales fueron aprobados 12 (y 2 serán tratados en la sesión de hoy). En términos futbolísticos -y políticos también- el resultado manda”, se explayó.
El mensaje era para los intendentes que respaldan al gobernador y habían pedido “apoyo” de los legisladores. Y para algunos ministros que también exigieron colaboración. Además apuntó contra la oposición, a la que acusa de no avanzar en las negociaciones.
Un día antes, el presidente de la Cámara, Alexis Guerrera, que responde al massismo, puso la responsabilidad en el Ejecutivo. “Confiamos en que el Gobernador, que lleva adelante los diálogos (para lograr las mayorías parlamentarias) podrá lograr la tranquilidad que tanto necesitan los y las bonaerenses”. La pelota en el campo contrario.
Los renglones que trababan las discusiones se pueden resumir en estos ejes: se reclamó al Ejecutivo un fondo de $ 400 mil millones para repartir a los municipios. La Gobernación accedió a estirarlo a $ 160 mil. Los dirigentes radicales y del PRO querían eliminar un artículo de la ley fiscal que habilitaba al Gobernador a subir impuestos por encima de la pauta de 28% anual, fijada en el Presupuesto. También desde la oposición se exigía que el 16% de los fondos que ingresaran por endeudamiento se transfirieran a las 135 comunas.
Hubo otro intento de alcaldes del PJ de forzar una ley para derribar la prohibición de las reelecciones indefinidas, en medio de las negociaciones. Otra vez fracasó. Querían que algún legislador kirchnerista o el propio Kicillof empujaran la iniciativa. No llegó ni a evaluarse en la mesa de discusión chica. “Nadie quiere cargar el costo político de esa decisión”, coincidían.
Casi tres horas después de la convocatoria original, el presidente del cuerpo, Alejandro Dichiara, propuso un cuarto intermedio “sin plazo”. Diego Garciarena, presidente del bloque de la UCR que responde a Maximiliano Abad, planteó que la pausa fuera por una hora. “Lo que no se acordó en todas estas jornadas ya no se va a acordar porque nunca hubo un canal de diálogo o una puerta para debatir. Lo que hay es falta de voluntad política para resolver este Presupuesto y la Ley Impositiva”, dijo.
Hubo un intento frustrado con la presencia de dos ministros y un secretario de Kicillof: Pablo Lopez (Economía), Gabriel Katopodis (Infraestructura) y Agustina Vila (secretaria General) fueron al Palacio a una reunión con presidentes de bloque. No alcanzó. Era tarde para un consenso.
"La falta de diálogo con el ejecutivo hizo que se caiga la sesion, la oposición tiene mayoría y debería haber sido más escuchada en sus planteos, el ejecutivo se tiene que abrir al consenso porque hoy solo tiene 37 de 92 diputados", dijo el presidente del bloque PRO, Matías Ranzini.
Cumplido ese plazo, la sesión expiró. Y el presupuesto para afrontar el segundo año del segundo mandato de Kicillof también quedó descartado por el momento. El gobernador deberá prorrogar la última ley que se sancionó en 2023. El ejercicio que termina en cuatro días también está prorrogado.
Cómo seguirá funcionando la provincia de Buenos Aires y los reclamos de la oposición
Es un esquema que implica fragilidad institucional. Pero un amplio margen de discrecionalidad. El 80% de las partidas serán definidas por decretos de “adecuación presupuestaria” de un proyecto que se definió a fines de 2022. En el medio pasó un año con 250% de inflación y otro que llegaría al 125% de aumento.
El gobierno tendrá que usar la ley impositiva 2024 para emitir las facturas del año que viene. En enero no hay vencimientos, pero si para el segundo mes del año no se vota una nueva norma, deberá también adaptarse a la de este año.
El Senado se quedó con el recinto cerrado. "La Provincia necesita el presupuesto para poder avanzar en prestaciones que mejoren la calidad de vida de los bonaerenses. Es necesario contar con este instrumento para financiar y mejorar áreas claves como educación, seguridad, salud e infraestructura", reclamó el jefe de bloque UCR-Cambio Federal de la Cámara alta, Agustín Máspoli.
La disputa seguirá en dos meses. Y si no hay acercamiento parece que seguirá tensa la relación. "El camino de aumentar impuestos y sumar empleados públicos no va más. Los bonaerenses necesitamos un presupuesto serio y equilibrado para que la provincia sea viable y pueda crecer", adelantó Alex Campbell, del bloque de senadores del PRO que preside Christian Gribaudo.