A las 15 horas del martes. A esa hora, el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, dio por vencido el plazo que impuso para alcanzar un acuerdo con el sector empresario para congelar 1.650 productos de la canasta básica por 90 días. Por tal motivo, el funcionario convocó este martes a la tarde al presidente de la Copal (Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios), Daniel Funes de Rioja, y al titular de la ASU (Asociación de Supermercados Unidos), Juan Vasco Martínez, para mantener una reunión.

El funcionario los recibió con una resolución de la Secretaría ya preparada y que salió publicada este miércoles en el Boletín Oficial, por la cual dispone "la fijación temporal de precios máximos para 1.432 productos" hasta el 7 de enero, retroactivos al 1° de octubre.

A pesar de esto, Feletti aseguró que continuará el diálogo con las empresas. "No nos parece un gran esfuerzo hacer esto por 90 días, especialmente para las grandes empresas", dijo el funcionario al finalizar el encuentro con los directivos empresarios.

Ya el propio Feletti les había anticipado que iba a sacar el congelamiento de precios a través de una resolución si no se alcanzaba un acuerdo consensuado. Este martes cumplió la amenaza. "La lista acordada", dice el comunicado oficial, "incluye tanto primeras marcas como productos de pequeñas y medianas empresas", con productos de almacén, limpieza e higiene y cuidado personal.

Otro punto es que la resolución unifica los precios para todo el país. Los empresarios rechazaron opinar hasta conocer los detalles de la resolución.

En el comunicado oficial, Feletti lamentó que "haya fracciones de la cúpula empresarial que no sean conscientes de sus privilegios y se nieguen a adoptar una actitud colaborativa y contemplativa de la dura situación que vive hoy el pueblo argentino”.

No obstante, el funcionario remarcó que seguirá “abierto al diálogo y con voluntad de construir acuerdos lo más abarcativos posibles que permitan atender la necesidad de la ciudadanía”.

Los tiempos se aceleraron a partir del lunes a la noche. Tras un encuentro con fabricantes de consumo masivo, Feletti los había sorprendido al comunicarles que había sumado 403 nuevos artículos a los 1.247 originales, y les remitió un listado completo para que las empresas lo revisen.

"Encontramos cosas insólitas, con precios por debajo del 30% con respecto al 1° de octubre", ilustró un alto ejecutivo del sector. La misma fuente agregó que "nunca hubo diálogo genuino, todas las empresas mandaron las propuestas como pidió Feletti y ni siquiera las vieron".

Anticipando medidas muy duras, la Copal advirtió horas antes en un comunicado que "no están garantizadas las condiciones para conciliar las posibilidades de los sectores frente al pedido de estabilización de precios" y que "los acercamientos realizados hasta el momento reflejan la falta de voluntad por parte de las autoridades para realizar un acuerdo con el sector".

En la industria temían un congelamiento de facto o incluso la aplicación de la Ley de Abastecimiento. En ese caso, no descartaban recurrir a la Justicia.

Feletti debutó en el cargo hace una semana exactamente. Ni bien asumió, presentó un "plan de estabilización de precios" para contener la aceleración inflacionaria en la canasta alimentaria. Lo planteó como un acuerdo consensuado con fabricantes y supermercados, algo que por ahora nunca prosperó como tal.

Entre el lunes a la noche y este martes a la mañana, el equipo que lidera Feletti y que acompaña Débora Giorgi, envió a las compañías un mamotreto de 598 páginas en formato Excel, con los productos listados sin ningún orden y separados por provincias, y sin identificar a sus propietarios. En teoría, esperaba que las empresas elevaran sus propuestas de ajustes para hacer las correcciones.

La sorpresa que se llevaron muchas de las firmas al recibir el mail es que los precios que figuraban en el listado no correspondían a los que regían al 1° de octubre, con diferencias notables de precios con respecto a los que hoy están en góndola. En algunos casos, tenían valores entre 10 y 30% más bajos que los actuales.

La Secretaría de Comercio aceptó recibir sugerencias de cambios para alcanzar un acuerdo consensuado. Incluso, una fuente oficial confió a este diario que por la mañana "ya habían recibido varias" y que "se estaban analizando".

Con el correr de las horas del martes, el clima empeoró. En la industria recalcan que prevalecía la voluntad de diálogo y de acompañar al Gobierno. De hecho, muchas de las empresas convocadas participan de los programas Precios Cuidados y Súper Cerca, pero deslizaban que la lista confeccionada por Feletti contenía "artículos premium, que nada tienen que ver con las necesidades básicas de la gente".

El malestar mayor, no obstante, es que "muchos precios están por debajo del costo de salida de fábrica, algo inviable", señalan y concluyeron: "Si el Gobierno tiene decidido congelar, que no culpen a las empresas".

En sintonía con el equipo de Feletti, la flamante portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, manifestó que "se está tratando de llegar a un acuerdo, esa es la vocación del Gobierno".