Con un recorrido repleto de increíbles experiencias y nuevos aprendizajes, la joven actriz balcarceña Camila Peralta ha comenzado a dejar su huella en el mundo del teatro. Camila recientemente recibió el Premio ACE 2024 por su destacada actuación en la obra "Suavecita". Allí encarna -en la sala Caras y Caretas- a una trabajadora sexual entrañable, "apocadita, tímida, nerviosa", pero con poderes especiales. Lo hace a través de un sorprendente trabajo con la voz y con el cuerpo que elevan su performance actoral.

-Contanos un poco sobre “Suavecita” y lo que significa este reconocimiento...

-Suavecita es una obra que estoy haciendo desde el año pasado. La estrenamos en junio en un teatro pequeño, donde comenzamos a agotar funciones. Pasamos a un teatro más grande, el Caras y Caretas, y luego al Metropolitan en la calle Corrientes. Este reconocimiento, el premio a la mejor actriz de un solo personaje, es muy significativo para mí, especialmente porque estaba nominada con actrices que admiro.

-¿Esta obra, que tiene la dirección de Martín Bontempo, de qué trata? 

-Es un unipersonal donde interpreto varios personajes. El principal, ‘Suavecita’, trabaja en un hospital público y descubre que tiene un don. La obra es una comedia, pero también tiene un trasfondo dramático. Es un desafío y un aprendizaje hermoso para mí como actriz.

-¿Cómo es esto del unipersonal? Estás todo el tiempo en el escenario...

-Sí, es un gran desafío. Tienes que aprender mucho texto y estar muy concentrada. No hay compañeros que te salven si olvidas algo. Para mí subirrme a un escenario es siempre un nuevo aprendizaje. 

-¿Qué notas que pasa con el público cuando actúas?

-Es espectacular porque el teatro ofrece una conexión real entre el público y el actor. Cada función es única, y eso hace que la experiencia sea personal y diferente para cada espectador.

-¿Cómo valoras tu recorrido actoral desde el comienzo hasta ahora?

-Siempre he visto la actuación como un juego y un aprendizaje. Me he cruzado con personas que han compartido esta visión, y eso ha sido esencial en mi desarrollo. La diversión en la actuación es fundamental.

-¿El deseo de ser actriz siempre estuvo presente?  

-Sí, siempre quise actuar, pero no lo veía como una posibilidad real hasta que me mudé a Buenos Aires. Comencé estudiando cine, pero el teatro me atrapó rápidamente.

-¿Qué te inspiró en tus inicios?

-Crecí viendo televisión y cine. Recuerdo programas como ‘Cha Cha Cha’ o Todo por Dos Pesos que hacían reír a mi familia y eso me fascinaba.

-¿Y cómo es compartir escenario con actrices que admiras?

-Es increíble. Aunque son estrellas, al final somos compañeros de trabajo. He tenido la suerte de crear vínculos hermosos con ellas.

-¿Qué planes tenes para 2025?

-El próximo año saldrá una serie llamada ‘En el barro’ en Netflix. También seguiré con ‘Suavecita’ y hay planes de girar, incluso presentar la obra en Balcarce.

-¿Y hay gira programada para el verano? 

-No, pero tengo la oportunidad de llevar ‘Suavecita’ a México, lo cual me pone un poco nerviosa, además de ser un desafío más en mi carrera. 

El comienzo 

Mientras estudiaba cine, cerca de su casa descubrió un espacio donde enseñaban teatro. Se llamaba El Halcón Pelegrino, donde asistió al taller de Ignacio Bresso. Como actriz se formó, también, con Valentina Fernández de Rosa y tomó algunas clases con Cristina Banegas; y estudió dirección en la Escuela Metropolitana de Arte Dramático. 

A todas luces, Camila Peralta es un ejemplo de cómo la pasión y el esfuerzo pueden abrir puertas en el mundo del espectáculo. Su historia, claro, inspira a aquellos que sueñan con seguir sus pasos y pisar los escenarios mas importantes del país.