Justamente en esos valores quedaría el sudeste de Buenos Aires, un poco más arriba que los 40 quintales, pero con el amargo sabor de que sería la única región con merma respecto del año pasado. ¿La explicación? Las lluvias que en el resto del país empujan los rindes allí complicaron la siembra o directamente descartaron la temporada triguera, en muchos casos por la imposibilidad de implantaciones a tiempo.

Los problemas no son solo por defecto sino también por exceso. Es tanto lo que se espera recolectar que algunos creen que eso podría haber sido la causa de fondo de algunos cortocircuitos comerciales que surgieron esta semana, por pagos con descuento por parte de algunos exportadores, con el argumento de baja calidad del cereal.

Sucede que cuando se recepciona el cereal, habitualmente queda un 2,5% pendiente de pago, ad referéndum de los análisis de laboratorio que evalúen los niveles de proteína y el peso hectolítrico, cuyas bases son 11% y 73kg/hl, respectivamente.

El debate se replicó en la jornada Agro 4.0 del ciclo Democracia y Desarrollo, realizado el jueves en el Malba. Ante una pregunta al respecto de la periodista Silvia Naihstat, el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino, puso paños fríos y recomendó que haya dialogo entre los eslabones de la cadena para limar diferencias. Es lo que sucedió ese mismo día, porque los exportadores dejaron de descontar un 10% hasta certificar la calidad, como había sucedido días atrás.

En el mismo evento, el consultor del mercado de granos, Enrique Erize, advirtió que "no es una tan buena noticia el aluvión de trigo que se viene", porque hay muchos países exportadores que están mejor posicionados que la Argentina.

Por lo pronto, va quedando atrás la discusión sobre cupos de exportación y otras trabas de años atrás. Con las lluvias y un contexto macroeconómico “liberado”, las perspectivas son que habrá trigo para todos y no faltará el pan en la mesa de los argentinos ni en los barcos que lo demanden.

Luego de un progreso de cosecha intersemanal de 3,8%, el Panorama Agrícola Semanal de la BdC reflejó que casi 30% del área en pie ya se encuentra en madurez, mientras que el 70% restante ya se encuentra en llenado de grano.

Los contrastes imperan en el sur del área agrícola, las expectativas de rendimiento oscilan entre 15 quintales por hectárea, en casos puntuales de afectación por helada, hasta 65 qq/h en las zonas más favorecidas por la buena oferta hídrica del ciclo.

“El avance de la trilla continúa extendiéndose hacia zonas del centro del área agrícola, donde los resultados arrojan rendimientos promedio que superan máximos históricos”, subrayaron.