Alerta: usan el WhatsApp para la captación de chicos con fines sexuales

Es lo que se desprende de los casos que son denunciados en Balcarce. Para los pedófilos que están detrás de este tipo de delitos, el WhatsApp facilita el contacto y les permite además acceder a otros grupos. En nuestra ciudad, la subDDI ha remarcado la importancia de realizar rápidamente la denuncia. El control de los padres sobre los teléfonos celulares de sus hijos –y la alerta a las autoridades policiales- es la clave para prevenir estos hechos.

El uso de las redes sociales y la incorporación de la tecnología han cambiado el entorno y la manera en la que, la actualidad,  los chicos y adolescentes se comunican e interactúan socialmente. Antes de una llamada telefónica tradicional siempre se intenta un contacto a través de las plataformas digitales de mensajería. En esa línea, en el contexto de la complejidad que imponen las investigaciones del delitos de abuso sexual de menores, hay un dato que preocupa a las autoridades policiales y fundamentalmente a los padres que, en la mayoría de los casos, están ajenos a los contactos con los que los chicos chatean en algún momento del día. Los pedófilos saben que sus “objetivos” están detrás de las redes y esa característica se agravó por la evolución continua de la tecnología. Así es que se multiplican los casos de grooming, la captación de chicos a través de redes sociales como Facebbok, Instagram, Snapchat, Tik Tok o Musical.ly- y fundamentalmente la generación y distribución de pornografía infantil. La novedad es que, cada vez con mayor frecuencia, usan ahora el WhatsApp para la captación de chicos con fines sexuales.                                

Cabe mencionar que la mayoría de las denuncias de delitos informáticos recibidas en la de la provincia de Buenos Aires se relacionan con delitos que afectan la integridad sexual de menores.

El control de los padres sobre los teléfonos celulares de sus hijos es la clave para prevenir estos hechos.  Mencionan los investigadores que los pedófilos no cometen estos delitos desde lugares públicos, como cibercafés, locutorios o a través de redes públicas, sino desde domicilios particulares, porque el riesgo de exposición de los materiales delante de terceros -consideran las mismas fuentes- puede ser riesgoso y pueden dejarlos al descubierto. El delito de grooming, también conocido como “ciberacoso sexual infantil”, está tipificado en el artículo 131 del Código Penal y establece penas de entre 6 meses y 4 años de prisión a quien “por medio de comunicaciones electrónicas, telecomunicaciones o cualquier otra tecnología de transmisión de datos, contactare a una persona menor de edad, con el propósito de cometer cualquier delito contra la integridad sexual de la misma”.

Desde Grooming Argentina entienden fundamental que los adultos puedan interiorizarse sobre el grooming, además de generar un buen diálogo con sus hijos y ganarse su confianza. “Nosotros lo que aconsejamos siempre es el tema del diálogo y la comunicación y estar atentos a los distintos comportamientos que pueden tener los chicos”, aseguran. “Lo fundamental es no revictimizar al chico, no volver a retarlo porque los chicos son víctimas de engaño, y después del engaño, vienen las extorsiones o amenazas de parte del delincuente. Entonces ahí el chico tiene que decidir entre acceder a la extorsión o contarle a sus padres que después lo retan”.

Uno de los casos que en Balcarce impactó en la agenda pública se conoció el 30 de agosto pasado cuando la justicia recibió un reporte emitido por el National Center for Missing & Exploted Children referente a la interceptación de material de abuso sexual infantil trasmitido a través de usuario de la red social Facebook, quien había publicado diversos archivos con contenido ilícito. En un operativo de la subDDI, a cargo del comisario Maximiliano Blanco Rio, se identificó al autor del hecho y se certificó el domicilio, para terminar de concretar el allanamiento, secuestro y requisa. Con las pruebas recolectadas por la SubDDI Balcarce, la ayudante fiscal Laura Molina, solicitó al Juzgado de Garantías Nº 2 de Mar del Plata, a cargo del Dr. Saúl Errandonea, la autorización judicial para realizar el allanamiento de la vivienda del individuo. Así los investigadores llegaron hasta calle 3, entre San Lorenzo y Chacabuco. Allí efectuaron el procedimiento donde pudieron secuestrar el celular del sujeto desde donde se presume efectuó la distribución del material pornográfico de menores. Asimismo, el hombre fue conducido a la SubDDI para ser notificado de la imputación en su contra, quedando a disposición de la justicia penal imputado de una infracción al artículo 128 del Código Penal de la Nación.

El otro caso que se conoció hace pocos días y motivó un operativo similar fue en una vivienda ubicada en 20, entre 7 y 9, donde la DDI demoró por grooming a un hombre de 32 años, además de secuestrar elementos tecnológicos. El hecho que motivo el procedimiento, en donde fue víctima un niño de 12 años, llegó a la Justicia a partir de una denuncia que realizó su madre. Ambos asistieron a la sede de la SubDDI Balcarce para mostrar los mensajes y fotografías explícitos que recibía el menor en su teléfono, con ineludibles fines sexuales. Uno de los aspectos que llevó a agudizar la pesquisa para poder dar con el supuesto autor de los mensajes, era que el mismo decía tener 30 años y que era compañero de inglés del menor. Los investigadores requirieron diversa información a la empresa prestataria de telefónica celular sobre el titular de la línea, a los fines de identificarlo, al igual que se tomaron testimonios con estos fines. De esta manera, llegaron hasta quien sería el autor de los mensajes.

Según se mencionó, a través de la red social whatsapp, el joven pedía al menor que le enviara fotografías suyas sin ropa, al tiempo que él compartía imágenes de contenido pornográfico. Con las pruebas obtenidas por la subDDI, el Dr. Rodolfo Moure, titular de la Fiscalía Descentralizada, requirió al Juzgado de Garantías N°4 del Dr. Tapia, la pertinente orden de allanamiento. En consecuencia se procedió a identificar al autor del delito, secuestrándose además distintos elementos de prueba y elementos tecnológicos. El imputado quedó a disposición de la Justicia por el delito de “captación por medios tecnológicos con fines sexuales” conocido como Grooming y fue trasladado a la subDDI a los fines de formalizar su imputación en la causa.

No borrar los mensajes y fotografías

En todos los casos, la subDDI Balcarce sugiere que en caso de ser víctima de este tipo de delitos, no se borren los mensajes o fotografías recibidas, ni se haga ningún tipo de operación con las redes sociales, por ejemplo bloquear al usuario o reportar al perfil, a pesar de que su contenido sea repugnante o aberrante, ya que estos elementos resultan indispensables a la hora de formular la denuncia y continuar con la investigación. Así también, se requiere que inmediatamente concurran a radicar la denuncia a la subDDI con el aparato donde se hallen las conversaciones.