En los próximos días el intendente Esteban Reino tendrá arriba de su escritorio en su despacho de la Municipalidad una carpeta con una propuesta irresistible. Una empresaria del sector del transporte le presentaría un proyecto con una oferta de inversión cercana a los 40 millones de pesos para quedarse con la concesión del autódromo Juan Manuel Fangio. Dentro de las condiciones que pondría la empresa para cerrar el acuerdo, estaría la de delimitar la zona de explotación, ya que se piensa en un proyecto integral deportivo y turístico, y la cantidad de años de concesión que se otorgaría que, pedirán, sea de 25 años. Aunque todavía hay pocos datos en concreto, La Vanguardia pudo saber que la idea de la empresaria que le acercará la propuesta al intendente es, además de poner en valor el circuito como primera medida para que vuelvan las carreras, generar un polo turístico en la zona con actividades complementarias como, por ejemplo, la colocación de una aero silla en la sierra La Barrosa y armar circuitos vinculados al automovilismo y, en particular, a la historia de Juan Manuel Fangio. “La vamos analizar y si es viable vamos a avanzar porque la concesión es un camino que tendremos que recorrer”, le dijo una fuente del Ejecutivo a este diario. Una vez que el intendente municipal reciba la propuesta oficial vendrá otra instancia: el tratamiento de la oferta en el ámbito del Concejo Deliberante. Frente a este escenario, en el oficialismo ya preparan el terreno y buscan puntos de apoyo con algunos legisladores de la oposición porque lo que menos quieren en el gobierno es un escándalo en medio de la campaña electoral. Por otra parte, el intendente quiere analizar en profundidad la propuesta, hacer las consultas necesarias, acordar eventuales cambios con la empresa interesada, y luego si trasladar el tema para que se debata en la sede legislativa. Cabe recordar que hace una década atrás se había presentado un proyecto similar que pretendía quedarse con el autódromo. En aquel momento, la iniciativa –solo vinculada al autódromo y las carreras de autos- fue de Roberto Argento, hombre fuerte de la ACTC, quien gestionó en persona esa posibilidad ante el gobierno de turno, aunque finalmente no se concretó.