Esta semana la Fiscalía Descentralizada y la DDI inspeccionaron la Secundaria Nº 3 luego de que la mayoría de los alumnos de la institución abandonaran el establecimiento donde hace ocho días se generaron destrozos en el marco de los festejos por el denominado Ultimo Primer Día. Estuvieron presentes la ayudante fiscal, la doctora  Laura Molina y titular de la SubDDI, la comisario Cristina Páez. Según comentó Molina a Canal 28 y Radio Líder, "la intención fue establecer los daños que hubo en el establecimiento (28 vidrios rotos) y hacer una suerte de croquis del lugar para continuar con la investigación", dijo. Además, manifestó que "hay predisposición por parte de los directivos, los cuales ya brindaron sus declaraciones testimoniales y ahora continuaremos con las citaciones, y estamos a la espera de la nómina de alumnos de la promoción 2017 pedida ante Jefatura Distrital", explicó la ayudante fiscal. Por último, confirmó que están identificados los responsables, y que al menos dos de ellos no pertenecen a la institución. Los jóvenes están acusados de los delitos de lesiones leves, daños e intimidación pública, ya que los sucesos se dieron dentro de una institución donde había cientos de chicos, cuatro de los cuales fueron hospitalizados. Además, se informó que para la justicia ni los directivos ni el municipio tendrían responsabilidades en los hechos. Para las próximas horas, se confirmó, los padres de los chicos que fueron identificados como los responsables de los desmanes deberán presentarse en sede policial para aportar datos e información. En este contexto, el subsecretario de Protección Ciudadana, Alejandro López, acudió al Concejo Deliberante esta semana y dio detalles de la actuación del municipio a través de las cámaras de seguridad. “No hay ningún indicio en las cámaras que nos hubiera alertado de que algo así iba a suceder, y tampoco hubo nada vinculado con una concentración en el cerro  ‘El Triunfo’”, dijo López. Además, confirmó que los directivos, a pesar de que pidieron la presencia policial, no dejaron ingresar a los efectivos a la institución y se negaron a brindar declaraciones (lo hicieron luego de que la justicia actuara de oficio). “Todo lo que se produjo dentro del establecimiento es responsabilidad de los directivos porque se permite el ingreso de los alumnos y los dejan hacer lo que hicieron, no entiendo por qué no permitieron que actuara la policía”, sentenció el funcionario.