Esta semana la comunidad internacional vivió un acontecimiento histórico. Después de más de medio siglo de alta tensión, la relación de Cuba y Estados Unidos comenzó una nueva etapa, con la decisión del presidente estadounidense, Barack Obama , de enmarcar un diálogo, una iniciativa que su par en la isla comunista, Raúl Castro , acogió después de meses de negociaciones, en las que tuvo un importante papel el papa Francisco. Obama y Castro hablaron a sus países de manera casi simultánea al mediodía de sus capitales y confirmaron, después de horas de trascendidos, que los dos países han acordado reanudar las relaciones diplomáticas e iniciar vínculos económicos y de viajes. Eloy Delgado Hernández  (47) es cubano de nacimiento y vive a la distancia este nuevo camino que empiezan a desandar sus compatriotas. Eloy, aunque es investigador en física, atiende su zapatería Giovanni en el centro de la ciudad pero sigue atento a las informaciones que llegan desde Cuba vía internet y sueña con realizarse como profesional. Mientras el mundo se ilusiona con una apertura histórica, Eloy le cuenta a La Vanguardia que todos los años viaja a Cuba porque asegura que “extraño hasta a mis enemigos –risas-, ahora mismo estoy chateando con cubanos”, dice. Eloy está en la Argentina hace 15 años y en Balcarce desde hace 7. Como una especie de rutina que no altera por nada ni por nadie, cada mañana se levanta y lee los diarios de Cuba en su computadora. “No soy un cubano de los que me fui, sino de los que faltan”, indicó quien llegó a la Argentina por Carolina, quien hoy es su mujer. Sobre la noticia de la semana, aseguró que “me enteré por los diarios, por los canales, es más vi el anuncio en simultáneo que se ofreció ya que justo estaba viendo la CNN en ese momento cuando pusieron a Obama y a Castro al mismo tiempo.  Cuando lo vi me alegré mucho como a la mayoría de los cubanos. Pienso que hay un grupo muy reducido que puede llegar a estar en contra de esto y son justamente quienes viven de esto. Para ellos es negocio que siga el bloqueo y que Cuba siga aislada. Creo que la mayoría del pueblo cubano, del cubano bueno, del cubano que ama su país no puede estar a favor de que Cuba este aislada del mundo, no puede estar en contra de que Cuba tenga recursos económicos, no puede estar en contra de que Cuba tenga una apertura comercial al mundo porque la verdad Cuba es un pueblo alegre, siempre nos divertimos, pero tenemos carencias”, enfatizó Eloy. Sus palabras, cargadas de emoción, le da dan sentido y contexto a cada una de sus afirmaciones. 

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