“Es un orgullo que sigan confiando en mi trabajo”

Respondiendo con creces al voto de confianza que le realizaron los responsables de la categoría allá por junio de 2016, el balcarceño Carlos Sánchez está próximo a cumplir su sexta temporada como responsable técnico de una de las divisionales más importantes del automovilismo nacional: el Turismo Nacional. Sin lugar a dudas, la categoría que en cada fin de semana brinda los mejores espectáculos.

Llegó para reemplazar a un gran referente como Miguel “Toto” Abiusi, y durante este tiempo desarrolló una prolífica labor que terminó de consolidar el rasgo distintivo del TN: la paridad mecánica en las Clases 2 y 3, más allá de la diversidad de los modelos de vehículos que las componen. Su capacidad, sencillez, responsabilidad y eficiencia han sido las claves.

Este fin de semana la categoría estará arrancando un nuevo campeonato en el autódromo “Ezequiel Crisol” de Bahía Blanca; realización para la cual confirmaron su presencia más de 70 vehículos. Una temporada que volverá a tener 12 jornadas, en las cuales recorrerá gran parte del país.

“Será seguramente otra gran temporada de la categoría. A diferencia de lo que ocurrió el año anterior, cuando hubo que hacer fechas dobles para completar el calendario, ahora serán 12 fechas y diagramadas a lo largo del año. Hay muy buenas expectativas; con una buena cantidad de autos. En la Clase 2 no habrá incorporación de nuevos modelos, pero en la Clase 3, se sumarán dos: el nuevo Corolla con Julián Santero, y un Nissan Sentra, con Pablo Otero”, analizó Sánchez (cumplió 50 años el pasado 21 de enero).

La paridad mecánica

El principal rasgo distintivo que tiene la categoría es su notable paridad mecánica, lo que termina generando estupendos espectáculos en cada presentación. “Una de las razones es que la categoría tiene reglamento abierto. Cada 3 competencias se hace un análisis, y se hacen retoques si son necesarios para mantener esa paridad”, indicó.

No parece una tarea sencilla teniendo en cuenta que los modelos son bastante disímiles, hasta aerodinámicamente hablando. “No es fácil, pero se puede realizar. La clase 2 es la más balanceada porque los autos no tienen baúl; con lo cual eliminamos algún problema que había respecto de la carga. La Clase 3 tiene la misma condición, pero aún hay modelos homologados que tienen baúl; lo que obliga a colocar algún aditamento aerodinámico para igualar posibilidades. Eso en lo que respecta a los chasis”.

Y agregó: “si hablamos de motores, el equilibrio pasa por otro lado. En ese caso, hay que tener en cuenta las características de los trazados donde se va a competir. Por la diferencia en la aceleración, entre otras cuestiones. Después, el lastre equilibra posibilidades para hacer más peleada la lucha por el título”.

Con respecto a la incidencia de los distintos escenarios, aclaró: “Este año sabemos que serán 12 carreras, pero sólo está confirmada la fecha de esta primera fecha. Las características topográficas de cada lugar pueden ser favorables en la prestación de los motores para algún tipo de modelo en especial y eso debemos tenerlo en cuenta. Por eso esta indefinición es un contratiempo, pues evita trabajar a futuro con certeza. Pero nos iremos acomodando”.

Le preguntamos, cómo se deciden esos cambios. “Mirá, los pilotos siempre se quejan porque quieren más. Y las quejas generalmente vienen a través de la prensa. La realidad es que nosotros hacemos nuestro propio análisis. Todos los autos llevan un GPS que nos entrega información de primera mano, y nos permite evaluar todo. Además, cada vehículo tiene una planilla técnica donde se consignan todos los datos. Por eso que la evaluación es muy certera y de esa manera evitamos suspicacias”. “Lo que pasa es que a veces hay pilotos de una misma marca, que tienen diferentes motoristas. Algunos de ellos logran sacar una ventaja, aunque eso es mérito del propio motorista. En lo que respecta a la parte técnica, no hay ventajas para nadie”.

En algunas categorías, es bastante habitual que haya sanciones al finalizar una carrera, a raíz de alguna eventual anomalía técnica que aparece en las revisiones. Una situación casi inédita en el Turismo Nacional. “La verdad es que hay un contralor muy exhaustivo y ello evita esos problemas. Hubo algunos casos muy puntuales y esporádicos. Recuerdo en 1999 cuando se excluyó a Leonel Pernía por el Ackermann, cuando estaba peleando el torneo con el Vento. Algunos de esos problemas se daban antes de mi ingreso a la categoría, pero por suerte logramos corregirlos”.

El futuro de la categoría

A comienzos de abril se correrá la segunda fecha del calendario, oportunidad en la cual se realizarán las elecciones para determinar las nuevas autoridades de la categoría. Tras el sorpresivo alejamiento de Hugo Paoletti, asumió una conducción interina. La misma es encabezada por Javier Rabadé; teniendo como responsables de la Clase 2 a Joel Borgobello y a Emanuel Moriatis en la Clase 3. Le preguntamos a Sánchez si lo había sorprendido la salida de Paoletti, quien fue el responsable de su llegada a la categoría. “Fue un poco sorpresiva, ya que ocurrió en medio de la pandemia. En ese momento no tenía un trato tan fluido por la cuarentena y me sorprendió la noticia que le habían pedido la renuncia a Hugo. Fue una decisión de la asociación de pilotos y por lo tanto no me corresponde opinar”.

“Teniendo en cuenta que en marzo no habrá actividad, seguramente los pilotos tendrán tiempo suficiente para analizar la situación y encontrar la mejor solución para no entorpecer la exitosa marcha de la categoría”.

Asimismo, el preparador balcarceño indicó que uno de los puntos a mejorar tiene que ver con lograr una mayor convocatoria de público en los distintos escenarios, cuando se recupere la normalidad y se termine la pandemia. “El producto que elabora el TN y que llega por la televisión es de los mejores del país, con muy buenas carreras y pelea en todos los puestos. Lamentablemente no tiene el acompañamiento del público que se merece. Soy consciente que no tiene el folclore del TC, pero los espectáculos son muy buenos. Y por eso hay que trabajar para tener un mejor marco de público. La excepción fue el año pasado cuando se inauguró este autódromo en Bahía Blanca, justo antes del comienzo de la cuarentena. En esa ocasión hubo unas 40.000 personas. Fue algo inolvidable”.

Independientemente de su tarea en el Turismo Nacional, Sánchez sigue ligado al automovilismo zonal, como un auténtico legado familiar. Para ello trabaja en la preparación de motores para distintas categorías. “Siempre trabajo haciendo motores o elementos para el zonal. En realidad, hago todo lo que puedo, porque tengo un tiempo bastante acotado por esta función en el TN. Es un trabajo que disfruto mucho. Pero veo que me estoy poniendo viejo (se ríe) y trato de adaptarlo a mis tiempos. Antes juntaba los días y no había feriados ni días de descanso. Eso a veces te aleja un poco de la familia. Trato de cumplir con todos a mi tiempo. Pero no puedo dejarlo de lado. Es una pasión que heredé de mi viejo y trato de disfrutarlo al máximo”.

Por último, se refirió al significado de llegar a los 6 años en su función dentro del Turismo Nacional. “Es un orgullo que sigan confiando en mi trabajo, Y trato de hacerlo con la mayor responsabilidad, porque siento que además de una tarea profesional, estoy representando a Balcarce”, cerró.