Para guardar el acceso directo en el escritorio de su celular, pulse y haga clic en AGREGAR A INICIO

Información Premium Registrate

¿Olvidaste tu contraseña?

Jueves, 25 de Abril de 2024 | 2193 Usuarios únicos

Fútbol

“Me retiro satisfecho con lo que hice en mi carrera”
30-11-2016 Poniéndole final a una actividad que abrazó con auténtica pasión a lo largo de 13 años, Eduardo Aiza decidió retirarse como árbitro de fútbol. Y lo hizo de la misma manera que la había comenzado: dirigiendo un encuentro de infantiles. Atrás quedó una carrera en la cual tuvo la oportunidad de actuar en los torneos locales, pero también en los Argentinos “B” y “C”.
"Me retiro satisfecho con lo que hice en mi carrera". Con simpleza, sin estridencias, pero con una profunda convicción, Eduardo Aiza decidió poner punto final a una actividad que fue su pasión por espacio de 13 años: ser árbitro de fútbol.
Siempre se dice que aquellos que se aferran a esta profesión deben estar preparados para todo. Son los que van a cada partido y su presencia es imprescindible, más allá de que nunca tienen hinchada. Obviamente, tienen influencia decisiva en las definiciones, pero lo mejor es que pasen desapercibidos. Cuando hacen sonar su silbato, siempre recibirán algún cuestionamiento. Aunque muchas veces les asista la razón. Y es tan cruel la situación, que en innumerables ocasiones son buscados como "chivos expiatorios", cuando las culpas y errores deberían repartirse entre los jugadores y los entrenadores.
Si el equipo gana, está todo bien. Pero si pierde, es culpa del árbitro. Quien no ha escuchado estas reflexiones (excusas) a la salida de una cancha o en alguna conferencia de prensa post-partido. Pero también es cierto que quienes abrazan esta profesión lo hacen con una pasión que los hace inmunes a todo.
Eduardo Aiza, o el "Gallego" como lo llaman sus allegados, es alguien que ha comulgado con esta pasión por largos 13 años. Luego de desarrollar el habitual tránsito por el fútbol de inferiores, para ir aquilatando experiencia, llegó al ansiado debut en primera división. En este caso se produjo en un encuentro correspondiente el recordado torneo fusionado entre las ligas de Balcarce y Necochea. Fue en un Villa del Parque-Estación Quequén, jugado en la vecina ciudad balnearia, y donde actuó como línea, acompañando como uno de los colaboradores del árbitro Abel Melchor.
El debut como árbitro fue en 2011, en este caso en un Ferroviarios-Estudiantes, cuando el fútbol balcarceño recuperó su torneo principal.
A partir de allí "corrió mucho agua debajo del puente". Dirigió en los torneos Argentinos "B" y "C", y también en torneos de seleccionados juveniles, además de mantener su actividad habitual en Balcarce. Son 13 años, parece casi una vida.

                                          UNA PASIÓN
"El arbitraje es algo que me apasionó de movida. Yo había jugado al fútbol y en un momento Abel Melchor me invitó a sumarme al cuerpo de árbitros. La verdad es que al principio no quería saber nada. Pero en cuanto comencé a leer el reglamento me entusiasmé de tal manera, que ya nunca más pude dejar", le contó Aiza (cumplió 45 años el pasado 1 de febrero) a LA VANGUARDIA y a PASION 5 en una nota exclusiva.
Igual sabía a lo que se exponía. "A veces se hace complicado dirigir porque hay mucha gente que cuestiona y desconoce el reglamento. Hablo de hinchas, de jugadores y hasta de entrenadores. Por suerte, ahora quienes se reciben tienen una materia que es arbitraje, que ha empezado a solucionar este problema". "Pero muchas veces se siente impotencia cuando se cobra algo que es reglamentario y escuchás que te cuestionan con un evidente error de concepto".
Le preguntamos si era más complicado actuar en su ciudad, que en torneos de mayor nivel, y tampoco dejó lugar a dudas. "Es más difícil dirigir acá. Como el jugador o el técnico te conocen más, se tornan más atrevidos e intolerantes. La diferencia con el Argentino es abismal. Allí hay jugadores rentados que se manejan con mucho respeto hacia el arbitraje. Tanto fuera como dentro de la cancha. Me tocó dirigir a ex jugadores de primera división, como el "Pampa" Claudio Biaggio o Fernando Navas, y no deja de sorprenderte el nivel de respeto que tienen hacia la investidura del árbitro. Estén de acuerdo o no con alguna sanción".

                                        LO MEJOR Y LO PEOR
Al momento de hacer balances quisimos conocer cuál había sido su peor momento dentro de una cancha. "Fue en una ocasión, en la que me fueron a ver mis dos hijos. Había gente insultándome muy cerca de ellos, y se pusieron a llorar. Fue un momento muy duro verlos llorar. Me hizo mal, al punto que me costó mucho concentrarme en el partido. Por eso decidí que no asistieran más, porque les hacía mal a ellos y a mí".
El mejor momento también estuvo relacionado con sus hijos. "El mejor momento es cuando tuve la chance de arbitrar un partido que estaban jugando ellos. Fue una sensación rara, entre orgullo de padre y responsabilidad por mi tarea". "También recuerdo mi debut en el Argentino "B" en un cotejo entre América de Pirán y Atlético Villa Gesell, donde sentí que había cumplido una tarea sin errores". "También recuerdo con cariño mi debut en el estadio Minella de Mar del Plata, y el hecho de haber tenido la chance de integrar la única terna balcarceña que dirigió un partido de la Copa Argentina. Fue en 2011 en un Huracán de Tres Arroyos-Grupo Universitario de Tandil, que se jugó en la cancha de Huracán. Dirigió Javier Larripa, y estuve como asistente junto a Lucas García".
Aiza no dudó en buscar un espejo entre los árbitros argentinos. "De la actualidad me gusta mucho Darío Herrera, más allá de que ha bajado un poco su nivel. Pero me sentí identificado desde siempre con (Héctor) Baldassi. Sobre todo porque siempre supo tener un buen diálogo con los jugadores. Personalmente soy de la idea de que es mejor hablar que reprimir. El jugador es inteligente y entiende. Lamentablemente para los que no entienden hay que apelar a las tarjetas".

                                           LA DECISIÓN
La determinación de abandonar el arbitraje comenzó a tomar forma a principios de año, más allá de que se concretó sólo días atrás. "A principios de año tenía decidido dejar. Y cuando surgió la chance de dirigir en aquel partido del indor-show, con jugadores de primer nivel, como (Oscar) Ruggeri, (Oscar) Passet, (Alejandro) Mancuso y (Esteban) Fuertes, entre otros, pensé que era el momento ideal". "Pero luego el presidente de la Liga, Emiliano López, me pidió continuar, porque no había muchos árbitros, y ahí cambié la decisión. Aunque seguía dando vueltas por mi cabeza".
Respecto de los motivos que lo impulsaron a adoptar esta decisión, indicó: "El deseo de estar con mi familia. De pasar más tiempo con mis hijos. De recuperar el tiempo perdido en viajes e innumerables partidos, que me alejaron de ellos en algunos momentos importantes".
También fue claro al afirmar que "no creo que extrañe, más allá de la pasión que significa el arbitraje. Sobre todo porque esta es una decisión bien madurada".
Su despedida fue dirigiendo un partido de sexta división y posteriormente actuando como línea en séptima. Es decir, junto a los chicos. "Fue la mejor manera de terminar. Igual que había empezado: con los chicos".
Le preguntamos cuál fue su sensación cuando se terminó ese último partido. "Se me cruzaron muchas cosas por la cabeza. No me quise sacar la camiseta, porque se la había prometido a mi novia Laura, que estaba en la cancha. Cuando salí del vestuario se la entregué y le dije "Ya está". La otra camiseta será para mis hijos", relata con evidentes signos de emoción.
Quisimos saber si en algún momento se le pasó por la cabeza ser instructor de otros árbitros y volcar sus experiencias personales. "Nuestro instructor ya me lo pidió, y es algo que no me disgustaría. Aunque por ahora quiero tomarme un tiempo y pensar con mucha calma y sin apuros", indicó.
En la parte final de la charla Aiza señaló: "Me retiro satisfecho con lo que hice en mi carrera. El balance es muy positivo. Pude desarrollar una profesión que tanto me apasiona y eso es impagable. Seguramente voy a seguir yendo a ver fútbol. Ahora sólo tengo palabras de agradecimiento a mi familia que me respaldó siempre. También quiero reconocer a los jugadores, entrenadores, dirigentes y a los hinchas que me brindaron su respeto durante estos años. Siento que me voy en paz", sentenció.

Fotos y texto: (c) La Vanguardia 2016. Queda prohibida la reproducción parcial o total del material periodístico como las fotografías contenidas en esta información, que resultan de uso exclusivo del diario La Vanguardia. Se recuerda a los programas televisivos y sitios de internet que leen y utilizan material de esta página, sin citar la fuente, que están violando la ley de Copywright.

Más Noticias de Deportes
ver historial de notas
Publicidad
Publicidad

Contactanos

Crear Cuenta

Tengo Cuenta

Ingresar a Cuenta

Recuperar Clave

Generar Clave Nueva

Ingrese y confirme nueva clave