Alberto Fernández anunciará la próxima semana una nueva extensión de la cuarentena hasta el 12 de julio, con fuertes restricciones en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

El Presidente se reunió el miércoles con el gobernador bonaerense Axel Kicillof y el vicejefe de Gobierno porteño Diego Santilli con los que observó los datos sanitarios de la Ciudad y la Provincia, que se deterioraron con fuerza en las últimas semanas.

Se trató de una reunión tensa, en la que Santilli le pidió a Kicillof más controles en las estaciones de trenes, mientras que el Gobernador criticó a la Ciudad por la apertura de comercios y la habilitación para realizar ejercicio de 19 a 9.

Por otra parte el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, y sus pares de la Ciudad y la Provincia, Fernán Quirós y Daniel Gollán, respectivamente, se reunieron el jueves para analizar la situación epidemiológica del AMBA. Los funcionarios coincidieron en que pronto se superarán los 2000 contagios por día.

En el gobierno de Kicillof insisten con que de no frenar la circulación de personas y continuar con este aumento de casos, el sistema de salud de la Provincia colapsaría en las próximas semanas. La principal preocupación se centra en las camas de terapia intensiva